Ya todos lo suponen,
que tú y yo somos más.
¿Por qué seguir con esta farsa,
si todos saben que somos algo?
Tú y yo estamos destinados
a disfrutar de este placer.
Yo te gusto, no lo puedes negar;
tú me gustas, y eso es un hecho.
Eso desde hace rato se sabe.
Por favor, si me vas a mirar así,
bésame delante de todos
y susúrrame al oído que soy tuya.
Estoy tan perdida,
enterrada en el jardín de mi alma,
pensando en cómo reconozco tu sonrisa
en medio de la multitud.
Eres el peor de mis vicios;
tan magnético, soy tu imán.
Volteo y ahí estás
ven,
si quieres desordenar mi vida,
te pido que sea en la cama.
Desordénalo todo;
que tanto orden ya no me llena.
Necesito sentirme llena de otras maneras.