Me desperté con el alma arrancada
por un sueño, mermó mi corazón
toda esperanza voló en el pico
de un blanco cuervo y en su morada
será devorada por sus polluelos.
Porque será, las noches, las sombras,
se mueven solas, el tiempo no para
entre los sueños rebuscan olvidos,
asen versos ocultos en la sombra,
el día se oscurece entre la luz
de una vela.
Miradas envueltas
en gotas de almíbar, en penumbra
los parpados como lapas se pegan
en la ventana, donde correr vemos
olas de lágrimas, los anhelos,
la luna parpadea imitando
al horizonte faro que anuncia
los ojos arrecifes cercanos,
entre las miradas encalladas
el amor soñado, todo gira
en noche los parpados cerrados,
deseos, tristezas, melancolías,
miradas en los opacos espejos
que la oscuridad los ojos empaña.
Será que estoy solo, nadie me piensa.