Cuando pensamos que la vida es buena
Si descansa entre sábanas de seda
y hay manjares y vino en la mesa
cuando recorres la calle en auto de marca
entre exclusivos salones y fiestas
luciendo joyas, sin preocuparte por nada
sin duda es buena si el frío está afuera
y sales a él con botas, abrigo y bufanda
hasta que a esa burbuja de plata
la inquina propia o ajena se infiltra
y paciente va tejiendo su telaraña
perdiendo así el descanso y la calma
los manjares y las cosas no llenan
un frío vacío entonces se instala
hay temor, celo y también desconfianza
hasta que se rompe la frágil burbuja
y la vida hasta entonces tan buena
pierde sentido, es insulsa y vana