Si tú me olvidas…siguiendo a Pablo Neruda & Alicia...
Pablo Neruda
Quiero que sepas
una cosa.
Tú sabes cómo es esto:
si miro
la luna de cristal, la rama roja
del lento otoño en mi ventana,
si toco
junto al fuego
la impalpable ceniza
o el arrugado cuerpo de la leña,
todo me lleva a ti,
como si todo lo que existe,
aromas, luz, metales,
fueran pequeños barcos que navegan
hacia las islas tuyas que me aguardan.
Alicia
Tú sabes cómo es esto:
De amarte sin recelos
de recordarte junto al fuego
de ver mis otoños casi muertos.
Solo la luna es nueva
mis días ya son viejos
y mí arrugado cuerpo,
que solo desea ser renovado.
Subiré a un barco que me lleva ti
Para que toda la luz nos abrace
y vivamos en la isla
el aroma de nuestro amor.
Pablo Neruda
Ahora bien,
si poco a poco dejas de quererme
dejaré de quererte poco a poco.
Si de pronto
me olvidas
no me busques,
que ya te habré olvidado.
Alicia
No te prometo nada, amor
tal vez el tiempo me haga olvidarte
pero te enterraré conmigo
y sin buscarte
de a poco quererte
serás siempre mío,
lo prometo sin pronto olvido.
Pablo Neruda
Si consideras largo y loco
el viento de banderas
que pasa por mi vida
y te decides
a dejarme a la orilla
del corazón en que tengo raíces,
piensa
que en ese día,
a esa hora
levantaré los brazos
y saldrán mis raíces
a buscar otra tierra.
Alicia
Cuando el tiempo se alargue
no me busques,
pondré banderas en alto
que me sepas
que en ese día y a esa hora
sepas que te deseo.
Si en tierra ajena
echo raíces
no me busques,
será tú culpa
porque no llegaste a tiempo a mí orilla.
Pablo Neruda
Pero
si cada día,
cada hora
sientes que a mí estás destinada
con dulzura implacable.
Si cada día sube
una flor a tus labios a buscarme,
ay amor mío, ay mía,
en mí todo ese fuego se repite,
en mí nada se apaga ni se olvida,
mi amor se nutre de tu amor, amada,
y mientras vivas estará en tus brazos
sin salir de los míos
Alicia
Si cada día de cada hora
de tu calendario que está marcado
nos encontraremos,
amado mío
con la dulzura de tus versos
y el fuego incontrolable de tu cuerpo
sellaremos nuestros encuentros,
nutriéndolos con los besos de tu boca
este amor que nació en diciembre
amado mío.
En un afán por no perderte
te dejaré abrazado a mí para siempre...
Tomado de mi libro de poemas
Alicia Pérez Hernández… México
No es la pluma la que escribe, es el alma
Todos los derechos reservados©