Abrazo fugaz que deja una caricia invisible en mi piel, vive en la memoria el tormento latente, de momentos compartidas que ya no existen más.
Y así llegas,
volando la imagen de su presencia junto a mí,
disolviéndote en el tiempo, se esfuma el recuerdo, que desgastándose va sin remedio.
La distancia amarga y me ata al pasado,
inquieta, trato de soltarme, pero no hallo la atadura.
Sin poder hacer nada, solo espero que se rompan como mis sentimientos,
y desaparezcan algún día, como este pequeño fragmento.