Hernán Mejía Silva

LLUVIA NOCTURNA

El sueño que trae consigo

la lluvia a caudales,

su parábola imposible,

y, sus fractales.

 

Alucinaciones prestadas

de todas las posibilidades 

restadas, desarrolladas,

en su mayoría; levedades.

 

Su trayectoria marca el cristal,

parece rasgarlo sin interés 

sin procurar el mal, pese a que 

la belleza se desplaza con celeridad.

 

Hay una simpleza intrínseca 

en la lluvia nocturna,

aguardando en su complejidad

por la belleza taciturna.