Entre sorbos
de café,
mustias miradas
e inclitos donaires,
cae la lluvia.
Mañana ferviente
de íntimas angustias,
se convierten
en dilemas.
Hipótesis surgen
de estratagemas
incoherentes.
Escampa,
el trinar de aves
se escucha,
en matutinos anales.
El último sorbo llega.
Las ojeadas languidecen
cuando escampa
y no hay entente.