¡Es la luz de su beldad
el germen de mi ansiedad!
De sus ojos el color
me despiertan gran fervor
de adorar con tierno ardor
su hermosa sensualidad.
¡Es la luz de su beldad
el germen de mi ansiedad!
Ese timbre de su voz
penetra el alma veloz
y es de ensueños portavoz
por su bella claridad.
¡Es la luz de su beldad
el germen d mi ansiedad!
Yo de sus labios la miel
quiero beberla a granel
hasta que encienda su piel
de excelsa fogosidad.
¡Es la luz de su beldad
el germen de mi ansiedad!
De su estampa tan ardiente
quiero forjar la pendiente
donde deslice candente
de pasión la tempestad.
¡Es la luz de su beldad
el germen de mi ansiedad!
¡Si calma mi gran anhelo
que es causa de mi desvelo
yo le doy gracias al cielo
por darme felicidad.
¡Es la luz de su beldad
el germen de mi ansiedad!
Autor: Aníbal Rodríguez.