Yo sé que estás ahí.
¿Dónde exactamente? No lo sé,
pero en algún rincón de este vasto planeta existes.
Llegará el momento en el que nuestras almas se encuentren,
en esta vida o en la otra.
Y mientras tanto, te esperaré.
Dolerá esperar,
dolerá vivir en la incertidumbre
de no saber si estás cerca o demasiado lejos de mí.
Pero solo deseo, con todo mi ser,
que estés ahí… para mí.