ADIOS CIUDAD
Mañana dejo atrás la gran ciudad
al campo me iré, buscando aire humano
Allí abunda la paz y la bondad
pues la fraternidad se da en la mano
En bares gastan tiempo los urbanos
su afán es solo errar sin dirección
En el campo, los cielos soberanos
nos llenan de alegría el corazón
Me cansa la ciudad con su desgano
sus calles causan preocupación
En el campo, trabaja cada hermano
y no hay temor de robo o corrupción
Allí se crecen plantas y animales
y el alma encuentra calma en su labor
No hay clases ni distinciones sociales
tan solo la igualdad y su fulgor. *
Colombia.
D R A
jureme.