Te pareces a esas horas,
que se anuncias pomposas y se las lleva el tiempo.
Te pareces a esas horas,
que se encierran en mi cabeza,
que quedan fijas y siendo eternas se evaporan.
Tú que ya no espero, y los tic, tac
del viejo reloj. Tic, tac,
Tic, tac ya no muero.
Te pareces a esas horas
que son borrascas y malahora.
tic, tac, tic el salón de los pasos perdidos,
pasa, el tiempo y pasan las horas.
Tu recuerdo aparece de nuevo en mi memoria,
como un verso sin poesía, o bien como ráfaga
de una tempestad olvidada,
y sigo así contando las horas que muerden mi historia.
tic, tac te pareces a las hora vienes, te acercas y pronto te vas.
P SABAG. Safe creative.com