Rafael Parra Barrios

Poesía y sociedad impertérrita

La sociedad, 

impertérrita a la poesía, 

florida en poetas, 

carece de exegetas,

más no se detiene 

y florean sus estelas. 

Sobrevive al nihilismo 

y a la indiferencia, 

con su pureza 

y opulencia,

escribe caminos

con inteligencia.

No merma su fiesta 

ni su eterna canción, 

que erecta 

es sublime razón.  

La poesía,

vida de la vida, 

lo más vehemente 

que del alma, emerge, 

acto sagrado, 

que escribe, recita y canta

el hombre, su interlocutor, 

su sapiencia excelsa, 

su inmaculada pasión.

La poesía es jardín

que florece, 

pétalos que perfuman 

de amor los versos 

que vuelan en el planeta.