ATRÁS DE LA RAYA QUE SIGO SUBIENDO
El río quedó lejano
voy subiendo la montaña
no sé qué veré detrás
no sé si tendré un mañana,
cuando llegue hasta la cima
a mi vida ya pasada
miraré por un instante
luego le daré la espalda.
Y daré tan solo un paso
hacia el umbral de la nada
tal vez empiece algún río
y disfrute su cascada,
mientras seguiré subiendo
la pendiente ya se acaba
sigo dejando mis huellas
y aún me crecen las barbas.
Y en tanto no se termine
sin equipaje y sin fama
sin dinero y sin problemas
enfrentaré más batallas,
¿Cuánto es poco y cuánto es mucho?
¿En la cima qué se acaba?
Algún día lo sabremos...
¡No hay quien no pase la raya!
...