Vencer en la Tribulación
¡Oh, alma mía que me das el dolor,
no atas la salida de este pobre rencor,
hacia una sola buena existencia,
cuando sólo me dejas la fría ausencia,
cuando marcho hacia el más pernicioso abismo,
y vencer en la tribulación es por sí mismo…,
un laberinto de hojas de otoño a mi alrededor,
no desencadenas las amarras de éste corazón,
cuando por tí y por mí me dejas el clamor,
de un suspiro sobre la más bella pasión,
si vencer en la tribulación es marchar lejos,
y buscar la salida es querer en silencios,
la vida, el tiempo e ir al compás…,
a sentir la ternura porque si me amaras más,
sólo vencer en la tribulación queda el corazón,
en amar con el alma y la ilusión,
es entregar un sólo suspiro,
cuando eres el alma que aspiro…!
Por: Srta. Zoraya M. Rodríguez
EMYZAG