Antes de que se acabe la batería
tengo que decir
que por aquí andamos,
dale que dale al ingenio
para sacar algo
que sea del agrado,
de este auditorio
que ante uno se muestra
muy afable y campechano.
En este bullicio de intereses
al cual todos nos sumamos,
prevalecen las estrellas
sobre ese decorado
que es Poemas del Alma,
al cual día a día
nos vamos incorporando.
Ya las tendencias
son algo
que a todos gusta
por mucho
que digamos,
que se regalan a palazos,
pero la verdad sea dicha
es que
para estar en lo más alto,
hay que dedicarle tiempo,
a esto de ser poeta ensalzado,
pues de lo contrario,
las sumas se convierten en restas
y así muchos andamos
casi mendigando.
Yo a mis estrellas
les pongo nombres
que no son inventados
y así al terminar la jornada
ya tengo montado
mi Centro galáctico.
Bienvenidos sean,
digo ya terminando,
quienes se acercan
a este lugar apartado,
para dejar caer un poco
de ese amor profesado,
hacia quien solo es
en un saco lleno de poetas,
un minúsculo grano.