Cuatro letras en total
se escribieron en el ser
con misión de proteger
el gueto en la capital.
Producto sacerdotal,
tras cumplir su quehacer
se le volvió a endurecer
como a un seco lodazal.
Como Adán fue moldeado
y su Nombre en él vertido,
mas sin Él quedó apagado.
Si el hombre se ve aterido
porque a Dios tiene olvidado,
¿no es solo un gólem dormido?
A Borges