FRANCISCO CARRILLO

todo muere.

Muere el árbol por tener

sus raíces enfermizas,

mueren el ave y el pez

por cegatos de codicia.

Se mueren hasta las rosas

que a su tallo van unidas,

y sus pétalos marchitan

con el paso de las horas.

Muertas están caracolas

en un desierto de arena,

y dejan de blancas conchas

abono para la tierra.

Se mueren los sentimientos

podridos de tanta pena,

y de pena van muriendo

los hombres que no se enteran.

Todo nace y todo muere

toda vida va perdiendo,

como el río cede el cauce

como el sol, muere en invierno

como mueren verdes valles,

para que nazcan desiertos.

Esta vida solo es eso

es un tiempo, un desgaste

por el alma y por el cuerpo,

todo muere y todo nace

y todo, se va perdiendo.