Cesca V.

Soledad

 

 

Soledad de mis amores,

algunas veces vienes a mí acariciándome el rostro con tu aliento

apareces sin avisar golpeando el cerrojo de mi pecho portón acero

y altiva te acomodas en mi pálida desnudez con tus ojos amargos

 

Soledad de mis amores,

otras veces te elijo lejos del ruido de distracciones decoradas

y voy a tu encuentro para hacerte el amor y yacer en tus brazos

penetrándote para ver el reflejo de mi silencio en tus luceros mojados

 

Soledad de mis amores,

te amo como se ama la luz de un mañana sin cadenas temerosas

te temo como se teme a la oscuridad de un mañana sin sueños

impulso de rendirme ante ti o resistirme gloriosa ante tu embestida

 

¡Ay, soledad!

en tus ojos ingratos y amables veo la paradoja de amarte y temerte

paradoja de escuchar la paz de tu silencio y el inquietante ruido de mi mente

en mí está acallar los miedos para abrazarnos en la intimidad de los silencios