Ella solia sollozar, cuando nadie la veia
palpitaba su corazón, sin razón alguna
como una ninfa, dentro de las turbulentas aguas.
La temperatura cayo y el frío, la acogió
en esa noche escandalosa.
Escribió un poema para calmar el alma
recordo a un chico
que conocio poco antes,
paso rapido el tiempo y
ni una letra, fluyo.
Durmió, hasta que la primera brisa
despertara en su mirada
la unica palabra que
abria el paso a la agitada velada.