Un hombre ilusionado,
esperanzado,
es como un niño, con sueño desgarrado,
y de silencio muere.
Un hombre ilusionado,
es cual mares
sin navíos, como bosques sin ríos,
y de vacío muere.
Un hombre esperanzado,
busca al sol,
pero tropieza con sombras de su dolor,
y de olvido muere.
Un hombre, por una imagen,
una voz,
yace esclavo, mata, muere por saber
¡si su dama… le quiere!
Galva