Y de repente la vida empieza a sonar así;
Simula un sueño, ese cielo azul,
El alma respira calma, viviendo entre las montañas,
Persigo cada rayo de sol,
Y su calor abriga mi corazón.
Cuando cae la noche, el eco de extrañar
Resuena fuerte , pero hay que continuar.
Las estrellas brillan tanto,
no dejo de observarlas,
Parece un cuento, pero hoy es mi realidad.