EL SUDOR DE NUESTROS CUERPOS
El sudor de nuestros cuerpos,
un río de deseo que nos envuelve,
cada gota, una promesa de fuego,
una danza de pasión que nos cautiva.
Tus labios, pétalos de rubí,
se abren a mi sed,
tu piel, un lienzo de seda,
que se estremece bajo mi tacto.
El aire se llena de gemidos,
de susurros de placer,
un coro de deseos
que se desata en la noche.
En el calor de nuestros cuerpos,
el tiempo se disuelve,
la realidad se desvanece,
solo quedan nuestros latidos.
Cada caricia, un incendio,
cada beso, un terremoto,
un torbellino de emociones,
que nos eleva al cielo.
El sudor de nuestros cuerpos,
un elixir de pasión,
que nos une en un abrazo,
un fuego eterno que no se apaga.
© Corazón Bardo