O \"Extranjera de la caricia\"
A medianoche despierto atolondrada y con una pena que me mata.
He desperdiciado el sueño de tantos,
en esta tierra artificial.
Nací, dormí
Morí por el atardecer.
Aquí yace mi memoria, diría si la sostuviera aún.
La primera vez me sentí libre pues tenía la conciencia vacía
En ese mismo vacío descubrí una sensación que no me dejó dormir
durante un buen tiempo
fue súbito y me hizo sentir como si me estuviese derritiendo dentro de todas estas emociones.
Aquí están las cosas en las que aún pienso,
aunque continúo menospreciándome.
Extraño las risas,
la forma en la que se retuerce el plástico conocido.
Dichas caricias apáticas son lo único real que he visto.
¿Dios me ha abandonado durante este encierro?
Ciervo dramático de ojos azabache.
Ha llegado la hora de dormir.