José Luis Barrientos León

Un fuego abandonado

 

Hay un fuego abandonado

intentando revivir las voces

ávido de oxígeno que excite su delirio

de maderas que aticen su deseo

 

Un fuego desnudo

soñando con noches ardientes

que deje sus versos en las brazas

como historia del fuego

que consumió la soledad y los miedos

 

Un fuego enterado del lenguaje

que incinere el silencio y los ecos

a las sonámbulas sombras del olvido

un fuego como un poema

que haga arder los labios muertos

que transforme las cenizas en anhelos

 

hay un fuego abandonado

desacostumbrado al calor y la flama

que suspira por despertar como una hoguera

 la pasión y la entrega

como el vientre que ingenuo espera

la caricia sensual bajo una vela