Hernán Mejía Silva

RESPIRO

El ojo artificial,

se va humanizando,

en sus colores y sus lágrimas,

y hasta canta un poco.

 

La mirada humana,

se va resquebrajando,

en sus anhelos y sus paradigmas,

su reflejo ahora es opaco.

 

Se van complementado,

es cierto,

las cosas van cambiando,

pero nosotros somos solo un momento,

nos inventamos nuestros sentimientos;

nuestra ira, nuestro amor y hasta el tiempo,

y aún así, en automático, nos vamos olvidando.

 

Tenemos un respiro,

único y preciado,

¡Y no puede ser replicado!

a una íntima soledad pertenece,

y aunque pensarlo estremece,

es condición vital; es el último suspiro…