Moliner Vallés

Cuando las bocas callan

Hablar el lenguaje del amor sin palabras.

Con los ojos, la mirada. Con la punta de las pestañas.

Con las manos y los dedos, con el tacto terciopelo.

Con el recuerdo que guarda el olfato. Tu boca y tu pelo.

Con las palabras que una vez escuché, con el sonido de tus pasos acercándose, con tu balanceo y tu cuerpo de vaivén.

Con la sal de tu sudor, tus labios rotos y encarnados. Con la rojez de tus carnes derritiendo mis fauces.

Hablar sin decir, decirlo todo sin hablar nada.