Pablo Alfonso

Sin fronteras

A ti, que naciste donde el sol despierta primero,

y a ti, que habitás donde la luna se demora,

a los que llaman hogar a la nieve,

y a los que saben de mares tibios y su sal.

A los que rezan,

a los que dudan,

a los que cantan con el pecho desnudo

y a los que guardan el grito en la garganta.

A todos,

hermanos de arena,

de asfalto,

de selva,

de montañas que no saben de pasaportes.

Que el viento nos lleve los nombres,

que nos llame solo humanidad.