Dedicado a la Bruja irreverente
Látigo feroz con tu lengua azotas
poemas de azul cielo y hojalata
y por tu crudo verbo la barata
estupidez humana despelotas
Mas imagino delicadas gotas
de dulzor llanto o saliva grata
que tu hechizo teje al alma o ata
al vientre de los pocos que devotas
Irreverente, acechas y cuestionas
el éxito, el elogio, el hedonismo
vanidoso: ¡Ay, bruja como embistes
púas quevedianas, fieras leonas!
A tu paso se postra el conformismo
¡De cuánto ingenio sabio te revistes!