Soy el susurro que guía tus pasos,
el faro encendido en tiempos opacos.
Soy fuego, soy agua, soy tierra y soy viento,
el pulso en tu pecho, la voz del momento.
Soy la pluma que escribe lo que no confiesas,
el papel que calla tus penas traviesas.
Soy quien te observa sin ser descubierto,
el rastro invisible que deja el desierto.
Soy la escalera que sube a tus sueños,
el miedo que tiemblas, la fe en tus empeños.
Soy la caricia que nunca olvidaste,
el beso que un día sin darte dejaste.
Soy la tormenta que limpia caminos,
la rama que aguanta los fuertes destinos.
Soy lo que miras cuando cierras los ojos,
lo que no ves… pero siempre recojo.