Tu novia eterna

Que estúpida tristeza

Me esfuerzo a diario para ganarle al reflejo que vi ayer en mi espejo, 
Lucho contra las sabanas cada mañana, 
Porque el presente es aterrador y más cómoda esta mi cama,
Salgo a la calle, sola y disfruto mi propio recorrido, 
Escucho música a donde vaya sin la necesidad de cargar audífonos,
Camino derecha a veces chueca y si me caigo, me rio, 
Me detengo a raya si mis ojos ven algo bonito, 
Soy muy distraída, porque en media palabra, 
Puedo voltear a mirar un perrito, 
vivo, sueño y digo lo que tengo que decir, 
no me guardo mis sentimientos, 
si siento que te amo, no dudare en decírtelo,
me recargo de la energía del sol en un día frio, 
no me gusta que me toquen, pero si lo haces tú se me hace bonito, 
pero hoy, es mi día triste, 
existe ese día, mi día, 
donde me descompongo en mis propios brazos, 
lloro por esas heridas ya sanadas, 
lloro porque no puedo hacer nada de nada, 
y reconozco lo poco que me he amado, 
y todo lo que he soportado, 
soy consciente que no merecía eso,
y siento pena por mí misma, 
es mi día para voltear la página del libro, 
y entender que paso en ese momento en específico, 
¿Cuáles eran mis sueños, mis añoranzas?, 
Y si se han cumplido, me interiorizo, 
No es justo, pero nada lo es, 
Lucho contra mi dialogo interno que recapacita, 
Entiende, deletrea, da una pausa, una voltereta y replica, 
Me desespero, me muevo, soy inquieta, 
Necesito que alguien me detenga, 
Me sostenga, me sosiegue,
Me diga: calma, todo estará bien mi niña.