Son dignos de admiración
los avances de la ciencia,
de manos de una eminencia
me han devuelto la ilusión.
Disfruto de la visión
de un joven adolescente,
una nueva sensación,
veo todo diferente.
Esa lente intraocular
es un milagro divino,
él la ha podido instalar
dentro de mi cristalino.
Me he olvidado de las lentes
de ese coñazo que son
de los despistes frecuentes,
entre tanto, quita y pon.
Sin entrar a valorar
la satisfacción que siento,
solo he podido llorar,
borrado aquel sufrimiento.
Classman