Eres el grito del sol cuando el alba despierta,
la lágrima de un astro que muere en la noche,
eres el eco de dioses que forjan la esfera
donde la luna teje su pálido broche.
Eres el pulso del tiempo en relojes celestes
el caos de un cosmos que danza en tu piel
el verso infinito que escriben los vientos
cuando las estrellas sucumben a él.
Si el universo colapsa, que colapse en tus ojos
si la eternidad se apaga, que se apague en tu voz
porque eres la llama que incendia los cielos
la última aurora que besa a un adiós.