Enrique Fl. Chaidez

El viento

Tacto magnífico aviva

el cántico de los hombres;

llévalo sobre tus alas

a la nave de la noche.

 

Toda potestad del eco,

toda de la resonancia;

ama la generación

del ruiseñor tu palabra.

 

Es amor aire que aspiran

los santos del paraíso;

alegría incontestable

por innumerosos siglos.