Retomaría las partidas que dejé,
pero ajenas se volvieron…
Devolvería mis cartas de tercias y herejes…
sin suerte, en bronce se apilaron…
Volvería, para reclamar mis deseos,
mas por resignado me doy…
Creo… que jamás probaré el manjar de tus besos…
Farol incrédulo, el que me ilumina;
en él me refugio, ya su luz titila.
Cual tiza que truena capullos,
escribo en los túneles que suspiran
dicotomías que me exasperan y me erizan…
Derechos Reservados en Proceso.