EL VASTO PANORAMA DE LOS BOMBARDEROS QUE TAPAN EL CIELO
El vasto panorama de los bombardeos en serie
durante la II gran guerra, tal vez, fue un recurso obligado,
algo así como el máximo obligado inconveniente,
pues, en el caso contrario,
sin que cubrieran el cielo ululando los aviones
oleada tras oleada
y con los motores al máximo de revoluciones,
sin los miles de bombas que horadaban el suelo
alemán al entrar en contacto con la superficie, se hubiera alargado la guerra
y el número de las víctimas
hubiera aumentado seguramente.
Mientras que, gracias a la destrucción de los centros
urbanos por obra de los bombardeos en alfombra,
de las naves y de los polígonos industriales…
con las lógicas detonaciones y los consiguientes
destrozos en cadena, pues se llevaban todo por delante,
incluidos también a los habitantes…
Tal vez alguien haya calculado el número exacto
de las bombas que se dejaron caer sobre el terreno
enemigo, sobre los núcleos de población,
pero, de todas formas, el panorama no resultó
a simple vista tan devastado
como en el caso de los bombardeos en la franja de Gaza.
Pues es posible que estas últimas sean las imágenes
más impactantes que, sobre ciudades en ruina,
disponga la Humanidad.
Gaspar Jover Polo