Somos tú y yo
Entre la sombra de un febrero
Y el calor en tu vientre
Me anticipa el paraíso
Tus cerezas en la copa de un árbol
Y un riachuelo surca tu espalda
Afuera la lluvia y el paso ansioso
De algún ignoto
El reloj que dice <<ya son las seis>>
Me muerdes los labios
Y tu saliva fresca me hace olvidar
El camino a casa
Mi mano sobre tu piel
Tu cintura es un galeón de bruma
Que quiere guerra
Algún día
Habrán pasado cincuenta años
Y no habrá más recuerdo
Que algún poema
Tus pétalos me reciben
Y son tan cálidos como un verano
Con brisas y mil promesas
Tu voz de sílfide me golpea el rostro
Suspiras
Y me abrazas
Sonríes mirándome a los ojos
Como quien desea una tregua.