Bernardo Arzate Benítez

Los dolores del alma.

 

 

Nunca se sobrepasan los dolores del alma.

Se aprende a vivir con ellos,

pero a veces llegan destellos 

que nos roban la calma.

 

He luchado como un loco 

por olvidar mis errores,

pero he avanzado tan poco

que aun sigo en mis dolores.

 

Y tras años de experiencia en asuntos del dolor,

le he enseñado al corazón el valor de insistencia.

¡Que se aferre fuerte del amor,

mientras dure la existencia!

 

Autor: Bernardo Arzate Benítez