En el eco de un latido,
tu presencia comenzó a surgir,
en ese instante te amé,
pequeña flor de enero.
27 semanas después,
tu luz iluminó mi ser,
mi vida cambió por completo,
en un abrir y cerrar de ojos.
Tus ojos se clavaron en los míos,
como gotas de lluvia en una roca,
tu sonrisa es la alegría de mi existir,
y tu risa llena mi vida de felicidad.
En pañales te vi crecer,
tus travesuras me hicieron reír,
tu inocencia me llenó de paz,
y tu amor me hizo sentir renacer.
Cuando te vi en la bañera,
indefensa y llena de candor,
supe que mi vida entera,
sería tu refugio y tu amor.
Dormir en mi pecho te acurrucas,
tu paz me llena de calor,
sueños de angelitos dibujas,
en mi alma sembrando el amor.
Un jardín de cosas bellas,
para ti quiero construir,
que tu sonrisa siempre brille,
y la felicidad te haga sentir.
Tolerancia, amor y compasión,
me enseñas cada día a ser,
una mejor persona, con pasión,
para guiarte en tu caminar.
Nuestro vínculo es más que palabras,
un lazo que nos une sin fin,
un amor que no tiene fronteras,
sempiterno e infinito jardín.
En ti me veo reflejado,
en tus ojos mi alma se ve,
eres mi todo, mi adorada,
el amor que por siempre tendré.
Contigo comparto risas y llanto,
aventuras y sueños sin par,
eres mi cómplice, mi encanto,
la razón de mi existir.
Te amo con todo mi ser,
mi pequeña flor de jazmín,
eres mi más grande placer,
el tesoro que guardo en mi jardín
Juntos exploramos el mundo,
mano en mano, sin temor,
aprendemos cada día algo nuevo,
y nuestra conexión se fortalece con amor.
Amor entre pañales te brindo,
cariño, protección y abrigo,
seré tu guía y tu protector,
Eres mi compañerita de aventuras,
Eres mi tesoro más preciado,
la luz que ilumina mi camino,
te amo con todo mi corazón,
mi pequeña hija, mi amor divino.
JTA.