Perdiendo el sentido entre las noches, las mañanas y esos atardeceres.
Nunca sé a donde voy, pero siempre se a donde no quiero volver.
Perdiendo el sentido de las cosas, del sentir. Tachó todas las palabras que alguna vez amé y reescribo entre ellas todo lo que alguna vez odié, no sé si me entendes. Pero tampoco busco que me entiendan ya que a veces en las más crueles noches ni yo puedo lograr entender lo que pasa dentro mío. Fui un invento de tus ganas de vivir y vos fuiste la ilusión que le dio un poco de significado a esa vida que daba por perdida.