Vals a un neófito
Que sabes de medidas, que el tiempo ya lo pierdes,
que tienes los niveles, mas, lloras y te muerdes,
¿quién sabe qué tú tienes porque no tienes nada?
Te falta neocórtex, la rima es desfasada
y dices demostrarnos con versos de hojas verdes.
Por eso este soneto te pide que recuerdes,
que entre hombres y poetas, no sirve la humorada;
existe diferencia con solo una mirada.
El hombre aunque le ponga pasión a la locura,
se turba con el ritmo que da literatura.
De ahí sale la excusa, que sufres, sufres tanto,
pero es mejor decirlo. Ya ves, duda no existe.
Poeta, que te llamas, ¿en dónde está tu encanto,
porque yo solo encuentro la cara de alguien triste?
Samuel Dixon