Malen

Otro día más..

 

Un día mas, uno más,
salta la radio temprana
y la cama, traicionera,
con sus sonidos de guasa,
me despide hasta la noche
con su ironía malsana,
como echándome del cuarto,
como diciendo: so vaga,
ya ponte en pie deprisita,
quita de encima tu carga;
mas yo pienso, solo pienso
y le digo adormilada:
a la mierda, qué te jodan,
y quédate desarmada.

**

Un día más, ya voy tarde
y en el trabajo habrá falta,
no hay tiempo para una ducha
ni tomar café sentada;
me lavo como los gatos
allí donde mano alarga,
y ay mi Dios, terrible espejo,
pero qué veo, ¿una cana?
Qué ese pánico no cunda,
que cosas peores pasan,
¿quedará café de ayer
y a lo mejor, leche agria?
lo que sea estará bien,
porque mi reloj no para..

**

Ando al trote por la calle
hacia el tren de la nostalgia,
a ese tren que me recuerda
que llevo vida animada;
cuidado con los tacones,
no sea, quede estampada,
por los varios agujeros
que presenta la calzada
pues más bien es un camino
muy apto para las cabras;
y en poco ya llego, llego,
a la estación de la carga
donde todos, apretados,
respiramos en manada.

**

Ya en el tren, ¡qué olor a tigre!,
allí voy apretujada,
pues no hay aire entre los cuerpos,
como sardinas en lata,
y creo, no toco el suelo,
creo que voy elevada.
Y cómo no. Lo de siempre,
lo de las muchas mañanas,
porque ya noto una mano
que se frota despistada
y me está sobando el culo
plácidamente y con maña,
pero no hay que pensar mal,
es para que no me caiga.

**

Es que son así los viajes
del tren de la alegre marcha,
el culo bien sobadito
y las tetas aplastadas,
pero a poquito llegamos,
ya por fin a la parada.
¡Cuidado con la presión,
puedo salir disparada!,
y es curioso cuando sales
con el pecho como tabla
que al rato se recupera,
como si el aire lo inflara,
y vuelvo a posar tacones,
vuelvo a trotar como cabra.

**

Ya por fin en el trabajo
tras la veloz galopada,
y otra vez oigo esa voz
bajo un bigote y la barba:
Llega tarde señorita
y además, con mala cara..
En fín, tan solo es un día,
uno más de vida grata
pues es grata la aventura
si es una aventura santa.
Un día más y estoy viva
viendo sonrisas en caras,
y cuando llega la noche,
yo sonrío dando gracias.

***

 

Madalen