Carlos Armijo Rosas...✒️
CONFESIONES…✒️ (¿quintillas octonarias? No...no lo son)
Confesarles: he deseado la mujer de mi prójimo,
he querido hacer el amor con ella en su propia alcoba,
quise probar la adrenalina con alguna vecina,
imaginé completamente desnudas a las monjas
y hasta deseé la mujer de mi jefe en la oficina…
Decir que nunca me ha resultado fácil confesarme,
como tampoco me resulta muy cómodo el abrirme,
he sido tan pecador como cualquiera de vosotros,
a veces de manera, más o menos involuntaria,
las más importantes, en plenitud de mis facultades…
Yo les reconozco que me embelesa hacer el amor,
combinando y alternando una gama de posiciones,
desde la más usada y normal, que se hace por delante,
hasta la más rara y solicitada, que es por detrás,
que quede claro: para mí las dos son muy importantes..
Siendo niño me escabullía en alguna vieja iglesia,
para beberles el vino durante la eucaristía,
robarme algunas hostias y untarlas en la mantequilla,
llevarme para la casa algunos cirios de la misa
para cuando la energía se fuera por la cornisa...
Confieso que como alumno también hice mis maldades,
a los profesores les hurtaba su libro de clases,
con un corrector me arreglaba sólo las malas notas,
y me robaba las preguntas de las pruebas finales,
ah!, también les falsificaba la firma de mi madre…
No reflexiones mi poesía...vívela