El Secreto del Mar
Cuando el mar me llama por mi nombre,
su voz me estremece como un amante en la penumbra.
La brisa ardiente acaricia mi piel desnuda,
y cada ola es una brisa marina sobre mi cuerpo ansioso.
Sus olas impregnan mis labios,
su vaivén me envuelve,
me posee sin prisa.
Me rindo a su abrazo infinito,
a la marea que me arrastra hacia lo prohibido.
Entre espuma y deseo,
el mar es mi amante eterno…
y su secreto, solo mío.