He de escribir versos impropios
carentes de métrica o compás
para hacer oír a sordos
que son versos nada más.
He de cambiar mi escritura?
o mi forma de pensar,
para que unos pocos digan
que lo mío, es rimar.
No cambiaré mi esencia
por no saber escribir
o atender a obediencias.
Porque la esencia está en mi
y porque son mis poemas
esa forma de escribir.