PASASTE.
Pasaste sin pasar,
como el mar camina,
sin por ello marchar.
Y pasaste sin estar
cual recuerdo sin abrazar,
que se lleva donde se está.
Así pasa el tiempo,
que por ágil o lento,
nunca deja de estar,
en nuestro ir o llegar.
Y estás: Cómo el cielo está,
en sus alturas sin volar;
Así el amor al marchar,
de nosotros nunca se va.
Pasaste sin pasar,
como ave sin anidar,
así como sin ilusión,
nada anida el corazón.
Y pasó tu cuerpo en mi piel,
mas no de mi sentido y razón,
como del tren no pasa el riel,
que lo lleva a cada estación.
Pero muy dentro de mí,
no pasas ni ausentas,
como no pasa el frenesí,
de mis calmas tormentas.
Y estás como está el viento,
imperceptible y virtual,
así; Es etéreo el momento,
cuando te suelo pensar.
Autor: Víctor A. Arana.
(VÍCTOR SANTA ROSA.)
Febrero 25, del 2025.