Jaime Alberto Garzón

Lo que no vemos

A veces el cielo parece en silencio,
las oraciones flotan, sin eco ni viento,
pero hay manos ocultas hilando misterios,
trazando caminos en tiempos inciertos.

 

No todo milagro estalla en el alba,
algunos despiertan en tierra callada,
como una semilla que rompe la sombra,
y un día sorprende con ramas y aurora.

 

Deja que el tiempo respire despacio,
el Reino florece donde hay un abrazo,
y aunque no veas sus hilos dorados,
Dios ya está obrando, ya está a tu lado.