CON AYUDA
Un día de éstos, escribiré un poema
que llevará tu nombre en la portada
y me pregunto a ratos ¿Qué se dice
cuando se sabe poco, o casi nada?
Y el corazón que es terco e insistente
me dice: Dile cosas que no sepa,
cosas que sólo existen en tu mente
cuando decae el ánimo, o la ilusión se encrespa.
Dile que has caminado urgentemente,
que tus pasos llevaban dirección,
que apuntaban, pero directamente
a sus brazos, sus pechos y su amor.
Dile que nunca, jamás, te habías sentido,
en estas circunstancias deplorables
y que tú, en tu sueño, has aprendido
que se te pelan, cada uno, de los cables.
Sí, dile que trastornaste tus razones,
dile que ya no sabes qué sucede
y ve a su encuentro, de una vez, por todas,
mientras termina el día... Mientras puedas...