Cuando te miro, mi mirada arde
Se enciende como mil soles
Y dibuja tu silueta y cada movimiento
Cómo el vaivén de tu cintura cuando caminas
O el de tu cabello que flota más ligero que el aire
O el de tu respiración que se acelera cuando me acerco.
Hasta que el silencio de la distancia acaba nuestra escena.