Ricardo Castillo C.

EDUCACIÓN PARA LA OBEDIENCIA

Siéntate recto, no hables en clase,
memoriza, obedece, no pienses de más.
Levanta la mano si vas a opinar,
pero solo di lo que quieren escuchar.

Te enseñan las normas, no los caminos,
te imponen el miedo, lo llaman \"paz\".
Y cuando crezcas, harás lo que digan,
sin una razón para cuestionar.

El mundo prefiere soldados sin mente,
peones sin alas, niños de sal.
Por eso la escuela fabrica obedientes…
para que nadie aprenda a volar.