Su mirada cardúmen
voy creando en un pensar,
elijo colores y risas,
conservando el andar.
En grises escribo su voz,
en sepia ese enojar,
con pinceles la pinto en mentes
a tan dulce soñadora.
Y que tan lejos llegará,
a cuanto aspirará,
imagino esas ganas de brillar
y la espero sin dudar...
Dibujo en cada noche
esa forma de atestiguar,
esos pasos de porcelana
y esa sonrisa tierna a la cual
conservaría en mi corazón mil días.
Tan solo vuelo sin encontrar,
pero la probabilidad
me tuesta como a pan,
en un árbol fui capaz
de brindarle creaciones.
Un velo morado se corrió,
ante la luz soy vendaval,
el sol chilla y aglutina
pues soy creador de anhelos.
Y con este deseo en manos te digo,
curioso montón de habladurías,
mi carpeta de maravillas está completa
y tan sólo necesito buscar
para encontrar a esa doncella
que no me quieres mostrar..